Los 3+2 dispositivos imprescindibles para el autónomo tecnológico

tecno
Tres son los dispositivos imprescindibles en la vida de un autónomo : el teléfono, el ordenador, y la tableta; que en determinados casos podrá cambiarse por una phablet para no ir por la vida cargando con un sinfín de aparatos. Por último, para quienes tiene que tomar muchas notas y no se hallan del todo con los teclados táctiles, existen en el mercado diferentes tipo de bolígrafo digital inteligente, smartpen en inglés.
A la hora de elegir el equipamiento, lo primero que hay que tener muy claro es a qué actividad nos dedicamos y qué uso se le va a dar a cada aparato. La respuesta a la pregunta ¿Qué necesidad me resuelve? determinará la compra total del material y la inversión que habrá que hacer. Un consejo: si los dispositivos que vamos adquiriendo son de la misma marca, mejor. Así te garantizas compatibilidad total entre ellos.

Teléfono móvil

Un autónomo que se dedique a las nuevas tecnologías necesitará un teléfono móvil con conexión a internet casi en el 100% de los casos. Respecto a modelos y prestaciones, la variedad es enorme y dependerá del uso que se le vaya a dar y le espacio que queremos que ocupe en el bolsillo. También habrá que tener en cuenta si combinamos el teléfono con una tableta o si lo utilizamos como único dispositivo móvil. Importante: el móvil es todavía un símbolo de estatus. Es conveniente tenerlo en cuenta.

Ordenador personal

El ordenador es la nave nodriza de la información y el dispositivo con mayor capacidad de rendimiento. Inevitablemente surgirá la duda: ¿Portátil o de sobremesa? Se suele contar con ambos, aunque cada vez es más común trabajar únicamente con el portátil, al que se le añade un soporte con ventilador para evitar el sobrecalentamiento del aparato si se pasa encendido muchas horas al día, e incluso una pantalla supletoria de mayor tamaño. En el caso de diseñadores y desarrolladores multimedia que requieran mucha gráfica sí que sería recomendable uno de sobremesa, generalmente más potentes que un portátil.

Tableta

El invento de la década. Un dispositivo plano y ligero, de tamaño folio -o inferior- de gran facilidad de uso y múltiples utilidades. Desde que Apple diera al mundo el iPad en enero de 2010, todas las marcas se han apresurado a lanzar sus propuestas al mercado: la variedad de modelos y prestaciones es enorme. Su uso profesional es destacado, pero el de ocio y multimedia tampoco es nada desdeñable. Ojo: se elija la marca que sea, para su uso profesional es fundamental que la tableta cuente con conexión a internet móvil (3G, 4G) y no solo por WiFi. Una de las grandes ventajas de la tableta es la movilidad y no conviene limitarla por tratar de ahorrar a la hora de la compra.

‘Phablet’

La solución todo en uno. En cierta medida la phablet representa la vuelta al teléfono ‘ladrillo’ de principios de la telefonía móvil, aunque por supuesto sin el peso y volumen de entonces y con unas prestaciones entonces inimaginables. Resulta una opción a tener muy en cuenta para quienes prefieran reducir el número de dispositivos que cargan de aquí para allá, y puedan pasar con una tableta pequeña o un teléfono grande. Al fin y al cabo, es las dos cosas. Mitad teléfono, mitad tableta. Un dato, que dice mucho de su creciente popularidad: Samsung Electronics ha vendido más de 38 millones de unidades de sus modelos Galaxy Note 1 y 2, sin contar con lo que espera vender de aquí a final de año con la nueva Galaxy Note 3.

El bolígrafo digital

Para reuniones, seminarios, conferencias o redactar textos; para bocetos, dibujos, diagramas: los smartpen han devuelto el auge a la escritura manuscrita. Un aparato de precio relativamente reducido (entre 80 y 150 euros, de media) que puede ahorrar muchísimo tiempo y esfuerzo a la hora de tomar notas o capturar ideas que luego se deseen trasladar a cualquier dispositivo.

Comentarios

Entradas populares de este blog

Dabbleboard, una pizarra para hacer más productivas las reuniones

Community Managers: Una fórmula sencilla de medir el ROI para Pymes

3 plataformas para construir elegantes sitios web sin programar